En 2018 Asepeyo ha declarado un total de 5.764 enfermedades profesionales de trabajadores de sus empresas asociadas, lo que representa casi el 24% de todas las declaradas en el Sistema de la Seguridad Social. Este porcentaje, que se ha mantenido estable durante los últimos 10 años, avala el firme y serio compromiso de la Mutua con el rigor en la gestión de esta contingencia.
Los trastornos musculoesqueléticos, las más frecuentes
Si tenemos en cuenta el origen de estas enfermedades profesionales, las causas son muchas y variadas, destacando:
- El 79% han sido ocasionadas por agentes físicos, provocando patologías como trastornos musculoesqueléticos, hipoacusias, nódulos de las cuerdas vocales, etc. El 95,6% de estas patologías están relacionadas con enfermedades profesionales causadas por posturas forzadas y movimientos repetitivos y, dentro de este grupo, el 66,4% por fatiga e inflamación de las vainas tendinosas (epicondilitis…) en carniceros, pescaderos, albañiles, y el 28% por parálisis de los nervios debidos a la presión (síndrome del túnel carpiano) en personal de mataderos, soldadores, carpinteros, etc.
- Con mucha menor incidencia nos encontramos con las enfermedades profesionales ocasionadas por agentes biológicos, un 8,67%, la mayoría en personal sanitario, con un aumento del 6,1% respecto al año anterior, por casos de escabiosis (sarna).
- En cuanto a las enfermedades profesionales relacionadas con agentes químicos, el 5,6% son por dermatitis en personal de limpieza y de peluquería, y un 4,79% son enfermedades respiratorias, destacando patologías como la silicosis en canteras/tallado y pulido de rocas silíceas y asma en panaderías e industria alimentaria y cervecera.
El 79 % de las enfermedades profesionales fueron causadas por posturas forzadas y movimientos repetitivos; es decir, por trastornos musculoesqueléticos
Respecto a las propuestas de incapacidad permanente total, el 87 % de casos son enfermedades profesionales respiratorias. En este grupo, destacamos 42 casos de neumoconiosis (silicosis) en trabajos en minas, túneles y canteras y en el tallado y pulido de rocas silíceas y trabajos de canterías, y 7 casos de asma en panaderos, pasteleros y confiteros, principalmente.
La mayoría de enfermedades profesionales no son crónicas
En cuanto a los costes de las enfermedades profesionales, durante el pasado año, los gastos en siniestros disminuyeron en accidente de trabajo (1,5%) y, especialmente, en enfermedad profesional (37,2%). De los partes totales por accidente de trabajo y enfermedad profesional, el 3% son debidos a estas últimas y corresponden a un 10% del gasto total por estas dos contingencias.
También destacar que un 53% de los partes de accidentes de trabajo y un 51% de los de enfermedad profesional son sin baja. Podemos afirmar, por lo tanto, que la mayoría de enfermedades profesionales no son crónicas ni producen incapacidades permanentes, una creencia muy extendida que queremos desmitificar con estos datos.
En cuanto a la tendencia y evolución de las notificaciones, las de enfermedad profesional se han incrementado desde 2007 hasta 2018, excepto entre 2010 y 2012, en que disminuyeron. En cuanto a las de accidentes de trabajo, han disminuido desde el año 2007 hasta el 2013, y a partir de dicho año se han producido incrementos hasta 2018.
Si quieres consultar más datos sobre las enfermedades profesionales…
Santos Huertas
Director del Área de Higiene Industrial
Dirección de Prevención
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